Enero: mes de la tolerancia

ENERO: MES DE LA TOLERANCIA.

La tolerancia es un valor moral que se basa en el respeto hacia los demás, hacia sus creencias, preferencias, cualidades físicas, discapacidades,  raza,  o nivel socio cultural.

Vogt (1997: xxv) asegura que si tenemos que vivir en una sociedad diversa, es necesario aprender cierto grado de tolerancia. Más importante aún, hay que enseñar tolerancia debido a que esta marca la frontera entre las buenas y las malas relaciones que puedan llegar a existir entre las personas. La tolerancia protege en contra de la discriminación y evita conflictos. Por lo que educar  las  futuras generaciones en valores a una edad temprana podría contribuir a que aminoren actitudes y comportamientos intolerantes.

Ser tolerantes implica una aceptación total de las diferencias existentes en los demás, pero eso no significa  pasar por alto conductas o actitudes inadecuadas.  Todo acto que atente contra la integridad de otro y los  comportamientos   que vayan en contra de las normas sociales establecidas  no deben ser tolerados.

 

Educar en tolerancia

En la actualidad es común olvidarnos de la importancia de fomentar valores en nuestros hijos y cotidianamente lo hacemos en forma superficial.

Hoy como cada mes me dirijo a usted padre y madre de familia que tiene en sus manos el futuro y la formación de sus hijos.

Estos tiempos que tanto  llevan al ensimismamiento y la banalidad  de estereotipos que  bombardean los medios de comunicación, conducen nuestras miradas e intereses en lo material, generándonos necesidades creadas. Buscamos llenar vacíos con vacíos.

El hacer conciencia sobre las necesidades y debilidades que como seres humanos tenemos en nuestro plano existencial, nos ayuda a ver más allá de los intereses propios. Es una ventana abierta hacia las necesidades de otros y que mejor que abramos no solo una ventana, sino la puerta del corazón.

Sus hijos le necesitan, necesitan de su amor, su comprensión, necesitan sentir la presencia de papá y mamá. Abrácelos, tómelos en su regazo y dígales lo maravillosa e importante que resulta su existencia en su vida. Que son el regalo más preciado que la vida le concedió.

La tolerancia,  así como los demás valores que hemos compartido con usted en este blog, requieren de constancia. No es algo que se aprenda en cuestión de un instante.  Se requiere de comunicación y el dialogo que se establezca con sus hijos, así como el ejemplo que se les dé son pieza clave para su formación.

 

Le proporcionamos algunas sugerencias que le podrían ser de utilidad.

*Si su hijo le pide ayuda para ser como aquel personaje que vio en la televisión, en los juegos de computadora u otro medio de comunicación, platique con él, explíquele de manera clara y precisa, que son solo eso, personajes, y ayúdele a ver sus capacidades y características personales de modo que las valore y las acepte como propias (es base para fomentar la tolerancia). Esto ayudara a su autoestima, a que se perciba el mismo tal cual es y que no necesita aparentar ser alguien más.

*Salir a lugares en donde pueda percibir diversidad en cuanto a culturas y costumbres le  ayuda para la aceptación de las mismas. Muéstrele la diversidad cultural que existe en su propio hogar y comunidad. Que todos tienen gustos diferentes en cuanto a música, lectura, preferencias culinarias, que existen diferentes tipos de personalidades  y que él, ella o ellos tienen una propia.

*Busque textos sobre diversidad e igualdad y compártalos en familia. En internet existen muchas herramientas que podrían ser de utilidad.

*Identificar actitudes y acciones que resulten intolerantes es un tema ideal para dialogar con los niños. Las escenas de alguna película o incluso en la vida real, lo que consideremos inadecuado. Hay que abordarlo en el momento que se suscite y dejemos que los pequeños también den su opinión al respecto.

*Si sus hijos en algún momento hacen referencia de algo o de alguien de manera despectiva o intolerante, indague los motivos que lo llevaron a tener esa visión y guíe la conversación de modo que interioricen la situación, fomentando la empatía y el respeto.

*Ámese a sí mismo y dé su amor y comprensión a los suyos. Viva y deje vivir y recuerde que con amor, todo es posible.

 

Lic. Psic. María Esther González Alvarado.

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