JULIO: MES DEL RESPETO
El valor del respeto es una cualidad que siempre nos llevará a la comprensión del otro, a aceptarle y reconocer cada una de sus cualidades. El respeto es la base de una buena educación. Podemos hablar de respetar a una persona cuando somos capaces de admirarle y apreciarle, cuando somos gentiles con nuestro entorno en general, cuando incluso una planta merece nuestro respeto porque llegamos a la conclusión y comprensión de que es vida y que como parte de nuestro entorno merece prevalecer.
Una falta de respeto ha llevado a muchos seres humanos a generar guerras, por la falta de comprensión hacia sus diferencias e incluso una persona puede generar una guerra hacia sí misma y llegar hasta su auto destrucción.
Promover este valor es una tarea del día a día y comienza desde la más temprana edad. Enseñar a los más pequeños este valor consiste no solo en mencionarles “Debes respetar a tu padre y a tu madre”, “Debes respetar la naturaleza”, ¡NO!, es algo que va más allá de las palabras, implica actos de demostración y eso es algo que se genera con el ejemplo.
Muchos pensadores a lo largo de la historia dedicaron tiempo para escribir definiciones sobre el tema. Immanuel Kant, en su filosofía moral expresó:
“Los seres humanos deben ser respetados porque son un fin en sí mismos. Al ser un fin en sí mismos conservan un valor intrínseco y absoluto.
El respeto exige la comprensión del otro, ponernos en sus zapatos, entender su postura ante determinada situación o experiencia de vida, es evitar agredirle, ignorarlo o cuestionarlo. Es abrazarlo con todo aquello que él es.
Acuñar el valor del respeto en la personalidad de un ser en la más tierna infancia es una labor importante y prioritaria, es por ello que El Tren del Saber, comparte hoy con ustedes algunas sugerencias para promover el valor del respeto en casa.
*Recuerde siempre y en todo momento que usted es ejemplo de vida para sus hijos(as), tal vez al caminar por algún parque les puede explicar sobre la importancia de cuidar las plantas e incluso las estructuras del mismo parque o explanada.
* Dialogue con sus hijos(as) sobre el respeto a las leyes, implemente reglas en casa y establezca límites, de manera que cuando ellos visiten algún lugar en su compañía puedan identificar y practicar el respeto hacia las reglas y lineamientos de ese otro contexto social.
*Hable con sus hijos(as) acerca de la autoestima de manera que puedan percibir que tienen una valía y por ende aprendan a respetarse a sí mismos y a los demás.
*Evite las comparaciones entre niños(as) y otros miembros de la familia, ya que al recurrir a las mismas es violentar su individualidad. La aceptación hacia las diferencias de los demás siempre nos llevará a la paz.
Dice por ahí una frase “Que tus actos hablen tan fuerte, que no permitan que se escuchen las palabras” Así que practiquemos todo aquello que prediquemos.
Y recuerde como siempre, que con amor todo es posible.
Lic. Psic. María Esther González Alvarado.