Junio, mes de la convivencia

JUNIO: MES DE LA CONVIVENCIA

De acuerdo a la definición del Diccionario de la Real Academia Española, la palabra convivencia proviene del latín convivere, que significa: “acción de convivir”, definiendo convivir a su vez como “vivir en compañía de otro u otros, cohabitar”.

Es bien sabido que el ser humano no puede vivir aislado de otros, es un ser carencial hasta cierto punto y a través de su existencia se hace vulnerable y pareciera que no cuenta con las armas necesarias para su supervivencia, pero si hay algo que es muy cierto es que es un ser en evolución constante y con necesidades de interacción con otros seres.

Cuando una persona nace, tiene necesidades de contacto y requiere sentir seguridad y abrigo, también alimento como parte de sus necesidades primarias, pero lo que le marcará una pauta importante para un buen desarrollo social es la interacción y el contacto con sus seres más cercanos. Requerirá entonces aprender a socializar, esta socialización en primera instancia lo dotará de herramientas bastas para un buen desarrollo a nivel global. Desde que la mamá alimenta al recién nacido y establecen un vínculo, estamos hablando de comunicación, la madre de manera inconsciente le envía un mensaje a su bebé de  seguridad y amor al momento de amamantarle. Mamá deberá ser el primer objeto de apego seguro para su hijo.

Posteriormente la forma en la que se interactúe con los niños determinará la manera en la que ellos a posteriori se integren al mundo social. Hay que tener presente que los niños son pequeñas esponjas que absorben sus primeros aprendizajes y conocimientos por imitación y si hablamos de normas sociales, bueno, estaremos abordando una gran gama de posibles complejidades y digo complejidades porque en la actualidad existe una gran diversidad de cambios a nivel social que transgiversan el objetivo de enseñar y formar en base a valores, llámense universales, sociales o personales. 

La sociedad ha sufrido cambios  relevantes en cuanto a los estilos de crianza y es que en la actualidad cuando los niños más necesitan de estructura y comunicación, pareciera que todo se soluciona con un ordenador, un tableta o la más socorrida nana “la televisión”, ya no se interactúa con los chicos en forma y se ha perdido cierta estructura jerárquica que deja entre ver que los niños en muchos casos son los que llevan la batuta en casa. Hay cambios de roles y entonces papá es mamá y mamá es papá, o los hermanos mayores terminan ejerciendo el rol de padres, o que la abuelita que ya crío a sus hijos y con su gran experiencia, pues que ahora críe a los nietos… 

Es importante hacer conciencia de la necesidad de vivir en base a una estructura social en la que cada miembro de la familia juegue y ejerza el rol que le corresponda, esa será una primera pauta para generar una buena  comunicación y convivencia, ya que es un mensaje que se le envía a cada miembro de la familia de manera inconsciente y que determina una estructura social. 

“Aquí hay una autoridad y hay reglas”

Interesante ¿verdad?

Bien, pues ahora que ya se determinó que hay una autoridad y que está respaldada por otra que debiera ser mamá, hay que establecer reglas y límites en casa. Los niños(as) necesitan aprender de un “NO” primero y posteriormente integrar a su conciencia que todo acto tiene una consecuencia y que es algo real, por eso es importante en algún momento de la vida de los niños(as) que puedan verdaderamente percibirlo así. En la primera infancia de los niños(as) su cerebro no cuenta con la maduración suficiente a nivel cognitivo para poder comprender conceptos abstractos, a los tres años cuenta con una cerebro con tal plasticidad que todo lo que yo requiera que aprenda lo aprenderá de manera fácil y rápida y si de valores se trata bueno, le estamos augurando todo lo mejor a ese niño(a), recordemos que es una etapa en la que estamos conformando personalidades y todo lo que introyecte a su ser le está moldeando. A los seis años aproximadamente contará con la capacidad de  comprender el mundo de manera diferente, pero no eso no significa que ya no requiera de apoyo, necesita que sus  formadores le sigan apoyando en su caminar por la vida.

En el hogar es donde los niños(as) aprenden y despiertan su interés por la vida, las relaciones sociales, aprenden a confiar en sí mismos, adquieren autonomía y conforman su autoestima. La familia es “comunidad y comunicación”, es la primera escuela de civismo para todo ser, es la sociedad creada para educar generaciones y establecer vínculos y por qué no cambiar historias transgeneracionales que auguren una mejora a las futuras generaciones. 

Y bueno, cuando hablamos de convivencia, abordamos cierta gama de valores en los que se destacan el respeto, la tolerancia, la empatía, la humildad, el AMOR… y podría extenderme más; sin embargo haré hincapié en los mencionados, pero para para ello volveré a mencionar en que el entorno familiar de todo ser es el que moldea y como padres formadores se tiene la premisa de brindar lo mejor a los más pequeños de casa. El Tren del Saber, desde que abrió sus puertas a todos los pasajeritos que han formado y forman parte de su comunidad, se ha dado a la tarea de brindar mes con mes a la comunidad de padres de familia, herramientas que sean útiles en su vida diaria.

Y en esta ocasión, tratándose del tema de convivencia, le dejamos algunas sugerencias  a trabajar en casa, sabemos que en esta situación de confinamiento algunas rutinas pudieron haberse modificado, pero también  sabemos que el amor por los hijos es algo que jamás cambia.

*Establezca reglas en su hogar, las reglas en el hogar permiten a los niños aprender cómo deben comportarse en todo momento. Esto les facilitará la convivencia en otros entornos ya que tendrán por entendido como deben portarse.

*Procure que las reglas establecidas, sean claras, así los niños(as) sabrán que es lo que se espera de ellos a cada momento. 

*La hora de los alimentos es relevante, por lo que es de suma importancia que sí su hijo(a) ya cuenta con edad suficiente para sentarse a comer en la mesa, se le integre y para ello es importante que evalué la etapa en la que esta su niño(a). El integrarles en la mesa es parte importante del fomento a la convivencia familiar.

*Juegue con sus hijos(as), la interacción que tenga con ellos es muy importante e incluso las reglas que establezcan en los mismos darán una estructura a cada juego y serán de utilidad a la hora de que les toque integrarse con otros niños(as) de su edad.

*Fomentemos el compartir, compartir es un valor importante, podemos ejemplificar para ellos hasta compartiendo unas galletas o la fruta en casa, recordemos que ellos aprenden en base al ejemplo. Si ellos perciben generosidad en casa, aprenderán en automático a ser generosos con los demás.

*Fomentemos el respeto hacia los demás y la cordialidad ente las diferentes circunstancias de vida. Enseñemos a través de documentales adecuados a la edad de cada niño(a) que hay diferentes estilos de vida social y cada uno de ellos merece respeto, que todos somos iguales y tenemos los mismos derechos. Que puedan percibirse empáticos con sus propios primos, vecinos y demás personas que conforman la sociedad en la que vivimos.

*Enseñemos las palabras mágicas “Por favor y Gracias” estas palabras son básicas para una buena convivencia. Cordialidad ante todo.

Recuerde que el ejemplo es la mejor de las herramientas en esta primera infancia y que con paciencia y amor todo es posible.

Lic. Psic. María Esther González Alvarado.

CONVIVENCIA

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